Sobre el autor

“En la medida en que ejecuto la obra, ésta va tomando forma”

Chus Matxinbarrena, pintor

Matxinbarrena ha aprovechado contar con más tiempo que nunca para desarrollar su afición de toda la vida, la pintura. Ve su obra en “fase de evolución”, en su recién inaugurada segunda exposición.

Julen Aperribai / Donostia

Chus Matxinbarrena (Donostia, 1956) ha trabajado siempre con el dibujo. No obstante, estos últimos años ha desarrollado mucho más esta disciplina. Expuso por primera vez hace dos años en el bar Resaca de San Sebastián y, recientemente, ha inaugurado la segunda, en el mismo establecimiento. Sus cuadros permanecerán expuestos hasta el 16 de junio.

¿Los paisajes que dibujas tienen relación con tu entorno?

- Lo que plasmo surge en mi imaginación, por lo que tiene relación directa con lo que tengo en la cabeza. Comienzo a pintar sin saber qué es lo que deseo lograr y, en la medida en que lo ejecuto, la obra va tomando forma.

Según dicen es tu personalidad lo que se refleja en tu obra. En ese sentido, ¿qué es lo que sugiere a los visitantes?

- Casi todos comentan que las obras transmiten paz y tranquilidad. Son cuadros muy sosegados y a mucha gente le resultan agradables.

¿Eso lo consigues gracias a las líneas horizontales constantes?

- Podría ser. Trabajo mucho con líneas paralelas y, al final, cada una de ellas va adquiriendo su forma. Por otra parte, valoro mucho la composición del color. Me esfuerzo en que no haya colores de sobra. Al mismo tiempo, me esfuerzo en romper con los colores habituales de los elementos, manteniendo, eso sí, la credibilidad.

El mar también se halla muy presente. ¿Es ésa tu fuente de inspiración principal?

- Si no tuviera que respirar en la atmósfera, viviría bajo el agua (risas). Desde que de chaval paseaba entorno a la bahía de la Concha, nunca me he alejado del mar. Y, claro, ello tiene una influencia directa en mis dibujos.

¿Cómo así has instalado tu exposición en un bar?

- Antes de exponer por vez primera, estaba muy a gusto con el trabajo realizado, pero no sabía cómo iba a responder la gente. Parece ser que a la gente le gustó. Era distinto a esta ocasión; abarcaba más temas y no había tanta unidad como en ésta, por decirlo de alguna forma. Deseaba ahora mostrar el desarrollo de mi pintura, en el mismo lugar en que comencé.

¿Te has esforzado en que haya mayor coherencia entre tus obras?

- Todavía me hallo en fase de evolución. La primera exposición fue un tanto experimental. En la segunda, crees saber ya qué es lo que estás haciendo. Ya veremos qué forma adquiere la tercera. No tengo grandes pretensiones. Siempre en tenido esta afición y estoy muy contento con que de vez en cuando tenga la oportunidad de exponer mi obra.

En el bar, será especial también la relación entre el cuadro y el visitante.

- Yo tengo interés por el arte, pero la gente, sin más, al bar va a tomar algo y muchas veces ni se fija en los cuadros. A las galerías la gente asiste de forma expresa a conocer la obra. La parafernalia en torno a las obras también suele ser mayor. Un bar, en ese sentido, no es un espacio tan arriesgado, tu trabajo puede pasar desapercibido.

¿En qué tendencia artística ubicas tu obra?

- La considero imaginativa, no sé si eso es una tendencia.

¿Un artista?

- Rene Magritte.

¿Para viajar, a dónde?

- A Cádiz (España), la zona me encanta.